Las vacaciones son la oportunidad perfecta para pasar tiempo de calidad con nuestras hijas e hijos. Una vez culminadas las responsabilidades escolares y laborales, es el momento de aprovechar el tiempo libre para fomentar el desarrollo de niñas, niños y adolescentes. A continuación, compartimos una serie de ideas sobre cómo emplear el periodo de vacaciones con actividades que estrechen los vínculos de confianza familiar, en donde podrá encontrar diferentes recursos adicionales por cada uno de los temas:
Alimentarse bien no significa renunciar a las tradiciones: En las fiestas navideñas, compartir comida en familia es una de las actividades que no puede faltar. Dependiendo de cada región, la oferta gastronómica es variada a la hora de sentarnos en la mesa. Aprovechemos esta época para enseñar a nuestras hijas e hijos cómo balancear la ingesta de comida, y alimentarse sanamente en lugar de consumir productos ultraprocesados que no hacen parte de nuestras tradiciones. Hablemos en la mesa sobre una alimentación saludable, existen muchas recetas nuevas para probar en casa, y es una oportunidad ideal para crear pequeñas huertas caseras.
El tiempo libre bien aprovechado fortalece a las familias: Existen muchas actividades que se pueden realizar con niñas, niños y adolescentes para fomentar su desarrollo integral. El periodo de vacaciones es ideal para visitar museos, ir al teatro, ver buenas películas, conocer reservas naturales y jugar en los parques con nuestras mascotas y amigos. Conocer diferentes lugares juntos afianza los lazos familiares y facilita los puentes de comunicación; son espacios en los que podemos conocer más de nuestras hijas e hijos.
Es posible festejar sin alcohol: la publicidad de manera errónea asocia la ingesta de bebidas alcohólicas con fiestas y celebraciones, por lo que durante las vacaciones niñas, niños y adolescentes son más propensos a consumir estas sustancias directamente por la influencia de algún familiar. Para evitar situaciones riesgosas para sus hijas e hijos, defina las normas sobre estos productos, y por ningún motivo ofrezca o promueva el consumo de alcohol a personas menores de 18 años. Enseñe con el ejemplo, el baile y la música se pueden disfrutar sin la necesidad del alcohol; en familia pueden jugar mímica, parqués o juegos tradicionales, sin consumir sustancias nocivas para la salud.
La conexión con nuestras hijas e hijos a unos cuantos clics: El tiempo de actividad en dispositivos electrónicos aumenta con las vacaciones. Innovaciones tecnológicas en los celulares, computadores, consolas de videojuegos y desarrollo de nuevas aplicaciones fomentan que niñas, niños y adolescentes pasen más tiempo frente a pantallas electrónicas. Por este motivo, es importante que como madres, padres y cuidadores definamos las reglas de uso de estos dispositivos. Evitemos exponer a nuestras hijas e hijos a los peligros de internet moderando las fotografías y videos que compartimos de ellos en redes sociales, hablemos sobre las conductas sexuales riesgosas en donde encontrará un aliado en nuestra línea de atención Te Guío.
El desarrollo de nuevas tecnologías puede ser una oportunidad fantástica para conectarnos con nuestras hijas e hijos, ya que podemos hablar sobre el contenido que reciben para fomentar habilidades como el pensamiento crítico o la creatividad. Las nuevas tecnologías y plataformas son una ventana que nos permite explorar el mundo de manera innovadora. Aprovechemos esta herramienta para unirnos más.
Preparar a niñas, niños y adolescentes para un regreso feliz al aula: El regreso a las actividades escolares puede ser difícil para nuestras hijas e hijos, fomentemos el desarrollo de rutinas personales como la organización del cuarto, la comida regular o el cepillado de dientes. Asimismo, promueva que sus hijas e hijos averigüen cuáles son las proyecciones académicas para el siguiente año o curso, ojeen las fotos de los libros de texto e interesarse por las temáticas que abordarán. Recordemos que nuestra función como madres, padres y cuidadores no es dictar clases, pero sí podemos fomentar el amor por el aprendizaje.
El momento de crear recuerdos desde la primera infancia: Muchos de nuestros primeros recuerdos nacen con las experiencias que tuvimos en las vacaciones. Recordamos los abrazos del fin de año, la sazón de los abuelos, a nuestros familiares enseñándonos a nadar, a montar bicicleta, a bailar. Aprovechemos las vacaciones para crear momentos inolvidables: explorar el río o la montaña más cercana; construir un rincón en la casa para contar historias; explorar el arte con las texturas y los colores de cada territorio (las hojas secas, la arena, la greda o el pasto); jugar con nuestras hijas e hijos lo que jugamos a su edad; enseñarles las canciones, versos, rimas y trabalenguas que nos enseñaron a nosotros; leer un libro en familia o contar historias de la navidad y nuestras tradiciones.
¡Y estas son solo algunas ideas para colmar de recuerdos y experiencias inolvidables las vacaciones!
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