Acciones urgentes para la garantía de los derechos de niñas, niños y adolescentes y la construcción de entornos protectores

Acciones urgentes para la garantía de los derechos de niñas, niños y adolescentes y la construcción de entornos protectores

Martes 26 de Abril de 2022

 

Con la Constitución Política de Colombia de 1991, la niñez y adolescencia dejaron de ser sujetos de protección para ser sujetos de derechos, con dos elementos adicionales: 1) sus derechos prevalecen sobre los de los demás, y 2) la familia, el Estado y la sociedad, son corresponsables de garantizar la efectividad de sus derechos. La garantía de los derechos de esta población imponen diez (10) tareas impostergables que, a pesar de los grandes avances normativos y del desarrollo de políticas públicas en el país, sigue siendo una tarea pendiente en las diferentes regiones del territorio nacional.

 

Reconociendo la urgencia de consolidar entornos que protejan los derechos de niñas, niños y adolescentes, así como la necesidad de fortalecer las capacidades de los actores relevantes para garantizar su efectivo cumplimiento, desde el 2003 Red PaPaz se ha constituido como una organización que integra familias, instituciones educativas y ciudadanos activos en general, con el propósito superior de contribuir con este gran reto, aportando acciones focalizadas en asuntos de relevancia, basadas en evidencia y buenas prácticas probadas.

 

Por este motivo, una de las misiones de la organización implica incidir para que los derechos de las niñas, niños y adolescentes sea una prioridad manifiesta que se incluya en los programas de gobierno de los candidatos a cargos de elección popular, así como en los planes de desarrollo nacional y territorial, y en los planes sectoriales.

 

Esto es hoy más urgente que nunca, pues la pandemia provocada por la propagación del COVID-19 desencadenó la adopción de medidas restrictivas que afectaron de manera específica y desproporcionada a niñas, niños y adolescentes, limitaron el acceso al servicio público, educativo, privaron el goce de actividades deportivas, recreativas y culturales, frustraron en algunos casos el derecho a una alimentación nutritiva y saludable, propiciaron el encierro prolongado y expusieron en mayor medida a esta población a situaciones de violencia física y sexual. Asimismo, las medidas para remediar los daños causados han sido tardías y no han atendido específicamente el interés superior de esta población.

 

Descargue el documento aquí